28/11/07

Objetivo cumplido

Por Nicolás Loncharich

Objetivo cumplido. Hace unos meses, en la primer entrega de esta columna, les decía que unos de mis objetivos era poder reavivar esa llama que yo sabía que tenían adentro, era poder trasmitirles lo lindo que se siente el fútbol cuando se juega entre amigos, era poder volver a armar un EQUIPO.

Después de este fin de semana y ese abrazo final en la mitad me di cuenta que ese principal objetivo se cumplió y no se dan una idea lo feliz que me hace. Chicos, a todos, muchas gracias por esta alegría, muchas gracias por confiar, por darme el lugar que me dieron, muchas gracias de verdad.

Sinceramente no tengo muchas más palabras, los que me conocen saben lo que siento esta camiseta y cómo siento este ascenso. Hoy me resulta muy difícil describirlo. Hoy tengo el corazón lleno de gloria y sé que nunca se me va a ir de ahí. Siempre va a estar en mi el recuerdo de estos 3 o 4 meses, cada partido, cada momento, la caravana involvidable, la concentración y sobre todo ese abrazo final en el medio de la cancha.

No me voy a cansar de agradecerles la confianza y el lugar que me dieron. Los quiero y los felicito por arriesgarse a disfrutar esto. Estoy convencido que ese es el gran mérito. Hay veces que los resultados no acompañan y arriesgarse a quedarse con las manos vacías no es fácil. Ustedes arriesgaron y ganaron. Ustedes fueron valientes de verdad.

Los felicito. Abrazo a todos.

El festejo, al ritmo de un pseudo Chayanne

Aunque la máxima euforia se desató en la cancha, los festejos continuaron a la noche en el boliche Ink. El local ubicado en la calle Niceto Vega, en pleno barrio de Palermo, se vistió de gala para recibir a los integrantes del plantel que logró el Ascenso. Bolas espejadas, señoritas despampanantes y la actuación estelar de Boris Aguilera, un pseudo Chayanne que se apoderó del escenario, fueron algunos de los ingredientes de la velada.

Es cierto, los players estaban cansados. Hubo ausencias importantes, como la del Profe Loncha, el Doc, Santana, Pusineri y algunos otros, pero igual la ocasión sirvió para conmemorar el logro de jugar la temporada 2008 en la "A". Por los Borrachos del Palier, volvió a hacerse presente el Chapu, que garantizó la integridad física de los jugadores, aunque pidió un porcentaje de los premios para la barra.

El más elegante fue sin dudas el Melli Diego, que lució un traje elegante sport a la medida de un delantero de su clase. Su vestuario fue el comentario obligado y el Pepe Sand hornereano demostró que todavía puede moverse con comodidad en la noche porteña.

También acudió a la cita Cristian Luchetti. El arquero de Banfield no quiso perderse el festejo rojinegro y estuvo en Ink. Pero, después del brindis, todo fue de Boris Aguilera, que conmovió con sus interpretaciones y fue secundado por una voluptuosa bailarina en temas como Enciende tu motor o Provocame.

Al final de cada canción, los hornereanos aplaudían a rabiar y hasta se oyeron varios gritos de "Grande Boris!" de parte de algunos integrantes del plantel. Aunque el desgaste pegó fuerte y la deserción comenzó a extenderse, el equipo quedó bien representado a través de exponentes nocturnos como Crouch Korn, Pablito Conti, el Melli Negro y Fede Pérez.

27/11/07

Al que quiera "Celeste", que le cueste

Y llegó la hora del partido. Después de la concentración, la caravana loca, el entrenamiento con pelota parada, las pastas y el breve descanso, para Horneros era tiempo de jugarse el Ascenso con Mapuche "Celeste". Última fecha contra el campeón. A un paso del gran objetivo de llegar a la "A". A 90 minutos de hacer historia otra vez y poner al rojinegro en el lugar que se merece. No era poca cosa.

Tal vez por todo esto, hubo una larga charla previa. El Pelado Miguel se puso científico y dibujó los componentes necesarios para una fórmula ganadora en una especie de gráfico de torta: la parte emocional, la física, la actitudinal. El Profe Loncha volvió a mostrar su confianza en el grupo y el equipo bajó las escaleras de la Casona con el firme convencimiento de obtener los tres puntos.

Para sorpresa de todos, el visitante apareció con un plantel de sólo nueve jugadores. La consigna, entonces, pasaba por no confiarse y afrontar el compromiso con la seriedad que el caso pedía. Todavía no estaba todo dicho, había que ganar dentro de la cancha. Afuera, la gente y el clima festivo podían funcionar como una presión para los rojinegros.

Pero el desnivel llegó pronto. Horneros manejó con inteligencia la pelota en los primeros tramos del partido y antes de los 10 minutos ya estaba 1-0 arriba. Tomi Melamed pisó el área por derecha, sacó un remate cruzado que el arquero contuvo a medias y ahí apareció toda la sapiencia del Doc para empujarla a la red. Sí, el goleador de área chica, bendecido por el "Dos gotas de agua" de la semana.

Parecía que el local no iba a tener problemas para sellar el trámite del Ascenso. Pero no fue así. Mapuche se resguardó bien atrás para no sufrir más goles y los rojinegros se relajaron un poco. La pelota iba y venía de un lado al otro, pero costaba crear situaciones de peligro. Así y todo, los de Ingeniero Maschwitz podrían haber aumentado el marcador a través de una volea de Franky Augeri o un cabezazo del Negro Lombraña.

En el segundo tiempo, más de lo mismo. Horneros parecía conformarse con la ventaja, ya que para Mapuche era casi imposible llegar hasta el arco de Agesta. Aunque sin brillar, hubo varias para los locales: por apuro o impericia se lo perdieron Pusineri, Bubu, Pablito Conti y sobre el final el arquero le tapó una increíble a Crouch Korn, que lo fusiló a tres metros de distancia.

El 1-0 parecía inamovible. Pero no podía faltar el toque de sufrimiento necesario para este tipo de gestas. Después de un corner, una pelota quedó boyando en el área hornereana y un jugador celeste pudo rematar desde el punto penal. Agesta no pudo hacer nada por detener el balón, los corazones se pararon y el largo Crouch apareció para despejar en la línea lo que hubiera sido un resultado trágico.

De ahí en más, no hay análisis que valga. Pitazo final. Abrazos. Locura. Bengalas. Tres tiros. "Me parece que Horneros se va de la B, me parece que Horneros se va de la B, para nunca, para nunca más volver". El sueño se había hecho realidad: el rojinegro terminaba tercero en el campeonato y estaba de vuelta en la "A".

Resumen del partido:

Formación inicial: Rodrigo Agesta; Tomás Melamed, Juan Manuel González, Juan Peluffo, Fernando Lombraña; Federico Pérez Acquisto, Diego Peluffo, Francisco Augeri; Pablo Conti; Emiliano Loncharich y Leandro Korn. DT: Héctor Miguel - Nicolás Loncharich.

Resultado final: Los Horneros 1 - Mapuche "Celeste" 0

Gol: Primer tiempo: Emiliano Loncharich.

Cambios: Segundo tiempo: Adrián Kaminker por Federico Pérez Acquisto, Diego Lombraña por Emiliano Loncharich, Bubu Melamed por Pablo Conti.

La figura: Emiliano Loncharich.

La mención es casi testimonial, de carácter simbólico. En un partido desnaturalizado y sin grandes actuaciones, el Doc se lleva el premio por haber hecho nada menos que el gol que aseguró el Ascenso.
Premio "Carlitos" Rodríguez: vacante.

En forma coherente con lo que sucedió durante casi todo el año, el juego de Horneros no abundó en lujos. Al rojinegro no le sobró nada y eso también quedó demostrado en el último partido de la temporada. Otras fueron las virtudes de este equipo.

Premio "Patadita" Borinsky: Leandro Korn.

Ustedes se preguntarán porqué Gandhi se lleva este rubro. Si durante el partido se portó como un señorito inglés, como todo el resto del plantel. Sí, es cierto. Pero en la práctica de la mañana repartió de lo lindo entre sus compañeros: topetazo a Bebi, pisotón a Rueda y más. Simplemente, no podía quedar impune.

Galería de fotos (gentileza Miguel Doña):






Caravana loca, banderazo y un DT orangután

Apenas abandonada la concentración, la caravana hornereana partió hacia Ingeniero Maschwitz. El hogar rojinegro esperaba al plantel con los brazos abiertos y los jugadores empezaban a sentir una adrenalina loca que hacía hervir la sangre y despertaba cánticos a medida que se acercaban hasta el Reducto sagrado.

Con el Profe Loncha a la cabeza, los autos doblaron la curva de La Estancia y las bestias comenzaron a despertarse. Las banderas flameaban en el viento y las primeras estrofas se hicieron sentir: "Ohhh, vamos a volver, a volver, a volver, vamos a volver...!!!". A la altura del Centro Evangélico para Asistencia del Humano o como se llame, los autos de detuvieron y los gritos se elevaron en el aire, mezclados con las puteadas de dos remiseros estancados en aquel súbito piquete.

La escena se repitió frente a las barreras de la guardia, allí mismo en La Pista y Caseros, la casa hornereana. Cuerpos afuera, agite de trapos, voces desenfrenadas y un técnico que cual orangután de la selva se trepó al techo de su auto y casi lo deja decapotable. Imágenes que permanecerán en la retina rojinegra por siempre.

Camino al Reducto, hubo una parada más: la casa de uno de los hombres más influyentes del club, el dirigente que maneja todo desde las sombras. Sí, nada menos que Fernando Augeri. El pope de Horneros salió a saludar al plantel, que lo vitoreó y siguió su epopeya hacia su destino final: el verde césped de la cancha más linda del mundo.

La última fecha empezó mucho antes

No, Horneros no se tomó las cosas a la ligera. Apenas consumado el triunfo ante La Tradición, la idea surgió como una flecha desde la cabeza del Profe Loncha: concentrar para el último partido contra Mapuche "Celeste", el que iba a decidir la suerte del equipo en su sueño de lograr el Ascenso.

Cerca de las 6 de la tarde del sábado, veintidos horas antes del pitazo inicial del choque clave ante el campeón, los primeros componentes de la caravana hornereana llegaban a las instalaciones que la Asociación Cristiana de Jóvenes (sí, la mismísima YMCA) tiene en la localidad de Matheu. Motivados, los players ingresaron al predio no sin antes sortear el festejo de 1 añito de un bebé local. ¿Estábamos en el lugar indicado? Claro que sí. Y Loncha lo había planificado todo al detalle, especificando la hora de cena, desayuno, esparcimiento y hasta los momentos de cacona. Un crack el DT.

Las habitaciones estuvieron finamente planeadas. Por un lado, estaba el semillero: Juancho, Bubu, Tomi y Rodri. Luego, los más veteranos, la cuota de seriedad del equipo: el Doc, Franky, Bebi, el Melli Diego y Rueda. Por último, los conflictivos, aquellos elementos más peligrosos del grupo: Narigón Pérez, Melli Negro, Crouch Korn y Pablito Conti. Ojo, todos ellos secundados por la mirada controladora del técnico, que astutamente se colocó en el centro del huracán.

Una vez que se colgó el trapo rojinegro para marcar territorio, la concentración quedó inaugurada. Se destaparon las primeras cervezas (no era cosa de tomar agua mineral tampoco), se prendieron los primeros puchos y se comenzó a palpitar con ansiedad la última final camino a la "A". Llegó el Pelado Miguel para meter presión y luego el temible Chapu, que trajo el claro mensaje de los Borrachos del Palier: "Si pierden, esperen lo peor".

Cuando fuimos a cenar, nos dimos cuenta que nuestra fantasía era bastante real. "¿Ustedes son los futbolistas?", tiró una de las chicas que servía. Inflamos el pecho, nos creímos un poco todo aquello y nos sentamos para comer una carne deliciosa que nadie supo bien si era osobuco, tortugita o directamente carnaza. En fin, estaba rico. De postre, un palito bombón helado marca Eskimo. Jugadores sí, pero del Ascenso. Nunca más apropiado.

La noche trajo un poco de todo: un tibio complot contra los veteranos (luego vengado con sangre en el dedo de Pérez), mucha Playstation (donde se destacaron Tomi y Rodri, también campeones anuales de fútbol tenis) y un partido de truco aburridísimo que terminó con un lapidario 30-11 para el trío Loncha-Tomi-Rueda. Luego, a dormir, aunque Pablito se fue a bailar de incógnito y dejó en su lugar una grabación para que nadie notara su ausencia.
Un millón de ronquidos del Doc después, fue tiempo de levantarse. Desayuno, fútbol tenis y pelotazo tremendo en la cara de Crouch Korn, que se descalibró y minutos más tarde hizo pedazos el ventanal de una habitación a segundos de abandonar el lugar. A barrer y pagar, claro está. Era el broche final, la señal perfecta que indicaba que estabamos listos para partir.

25/11/07

¡¡¡Para nunca, para nunca más volver...!!!

¡¡¡Me parece que Horneros se va de la "B", me parece que Horneros se va de la "B", para nunca, para nunca más volver!!!

Terminó el partido, Los Horneros ya le ganó 1 -0 a Mapuche "Celeste". El plantel que lo hizo posible posa para la foto.

Ahora es tiempo de festejar. A partir de mañana, empezarán a disfrutar de la crónica del partido, la concentración, la increíble llegada al country y los festejos del equipo.

Misión cumplida: ¡HORNEROS YA ESTÁ EN LA "A"!

24/11/07

A horas del partido más lindo del año

Por Nicolás Loncharich

Antes de ponerme a hablar del partido más lindo del año quiero detenerme tan sólo un segundo en el partido pasado. Quiero decirles que por primera vez sentí de una manera clara y definida orgullo de ser el DT de este equipo.

Lo digo porque en los 90 minutos se mostraron como un equipo ganador, que a pesar de haber empezado abajo en el marcador el rendimiento nunca bajó. La verdad, chicos, que le metieron agresividad, ritmo, actitud y fútbol, mucho fútbol, sobre todo después del segundo gol. Hicieron todo eso y más, y como les dije al terminar el partido, ese "más" es el que nos va a llevar a la "A".

Sobre el partido que viene sólo les voy a pedir una cosa: DISFRUTEN. Sólo eso. Si hacemos eso, estamos en la "A". La idea de la concentración es para eso chicos, quiero que estemos juntos, nos caguemos de risa, que compartamos esa noche en donde dormirse va a ser una tarea difícil, quiero que cada uno vea que su compañero esta en su misma situación.

Todos vamos a estar iguales, todos con las mismas ganas de ganar, con los mismos nervios, con los mismos miedos. Cuando nos demos cuenta que todos vivimos y sentimos lo mismo, nos vamos a sentir un EQUIPO y eso va a ser lo importante. Todos, de alguna manera u otra, tendrán la oportunidad de aportar lo suyo, para que este EQUIPO cumpla el sueño del Ascenso.

Por último, decirles que me hace muy feliz ser parte de este sueño, que me hizo muy feliz ver 11 en el último entrenamiento y que siento más que nunca que MERECEMOS este ascenso. Por este sueño voy a luchar hasta el último minuto. Sé que ustedes también lo harán.

Recuerden: DISFRUTEN.

Abrazo a todos.

22/11/07

Emiliano Loncharich = Martín Mandra

La comparación seguro lo reconfortará hasta sus profundidades sentimentales más íntimas. Primero, porque se trata de un jugador que dejó gratos recuerdos por Caballito. Segundo, porque presiento que se identifica con esa zurda impredecible que gusta de llevar el balón siempre pegado al pie. A Emiliano Loncharich le gustará que su otro yo sea nada menos que Martín Mandra.

¿Cuántas veces habrá nuestro Cirujano del gol visto las peripecias de Mandra dentro del campo de juego del club Ferrocarril Oeste? ¿Cuántas veces habrá analizado sus movimientos para luego copiarlos en el Reducto de La Pista y Caseros? Influido por ese inexplicable sentimiento verde, el Doc parece haberse mimetizado con algunas características de aquel largo delantero que también pasó por Nueva Chicago (foto), entre tantos otros clubes.

Claro, hay diferencias. Loncha tiene menos dinámica que el ex Ferro, acostumbrado a llegar al fondo de la cancha utilizando su velocidad. Pero el máximo goleador hornereano en actividad tiene, como ese mismo rótulo lo señala, una amistad mucho más profunda con la red.

Una amistad sin motivos, dirían algunos. Una de esas relaciones que no se sabe como se mantienen, porque una de los dos partes no hace demasiado como para que perduren. En eso, Emiliano Loncharich se parece a otro Martín, pero Palermo. No sólo es un "optimista del gol", es un verdadero "devoto", que gracias a la ayuda divina logra que el balón traspase la línea del arco.

Le puede pegar mordido, con la rodilla, la tibia, la nariz y hasta la nalga. Cuando el Doc le pega, la pelota entra casi siempre. Goleador de área chica, dicen algunos. Rebotero, esgrimen otros. No importa: todos valen uno y sólo alcanza con mirar las estadísticas.

Sobre el final del torneo, una lesión le jugó una mala pasada. Viajó a España a atenderse con el cuerpo médico del Real Madrid y ahora está de vuelta para encontrar algún balón en el área, mandarla a guardar y reeditar la gran "Doble Brother", una jugada maestra que sólo pocos conocen. Que así sea.

18/11/07

Un soutien fucsia, una pelota fofa, un sueño

Última oportunidad. Después de dos empates seguidos, Los Horneros llegaba al partido con La Tradición "B" con la obligación de ganar para quedar a un paso del Ascenso. Tensión, motivación, expectativa, concentración, todas palabras que daban vueltas por las cabezas de los jugadores rojinegros.

Con las bajas del Escandinavo Kaminker (aunque Osvaldo Piazza estuvo en el banco) y Mariano Tewel por lesión, el Club de los Once presentaba un plantel algo diezmado, aunque con el recambio juvenil que tantos réditos le dio durante esta temporada: el lírico y espigado Zequi Rambla, y el siempre productivo Bubu Melamed (esta vez los técnicos se habían aprendido bien su cara).

Sorprende el Melli Lombraña y no es por un gol. El Pepe Sand hornereano apareció con un sugerente soutien fucsia, dejando entrever buena parte de sus turgentes senos. Aunque dijo que era para evitar un fuerte dolor de costilla, algunos aseguran que el delantero gusta de disfrazarse de mujer en la intimidad.

Poca charla. El árbitro quiere irse rápido y se pone pesado para empezar el partido. La novedad: Horneros sale con un tridente ofensivo para buscar la victoria. Pablito Conti, el Melli fucsia y Crouch Korn hacen temblar a la defensa tradicionalista.

Buena actitud de los rojinegros en el comienzo. Aunque falta algo de claridad, el equipo de la dupla Miguel - Loncharich intenta jugar en campo contrario. Abundan los pelotazos para los delanteros y cuesta crear situaciones de peligro. Para colmo, después de un mal pase de Rueda en la mitad de la cancha, sale la contra de los locales y el "9" pone el 1-0 para La Tradición con un toque corto en el área chica.

Duro golpe para los de Ingeniero Maschwitz, poco acostumbrados a ir en desventaja. El intenso calor obliga al parate. Y después del refresco, llega la avivada hornereana: una pelota fofa hace su ingreso estelar al campo de juego. Las quejas por el balón no tardan en llegar, pero el árbitro dice que no puede cambiarlo hasta que no termine la jugada. Franky Augeri aprovecha el desconcierto, le mete tremenda rosca a la fofa y su envío en forma de centro se convierte en el 1-1. La jugada termina sí, pero en la red.

El empate tranquiliza a los rojinegros, que se van al descanso con la ilusión intacta. En el segundo tiempo, todo cambia. El "22" ya no maneja la pelota con tanta tranquilidad y empiezan a aparecer los espacios para el toque hornereano. La ubicación de Pablito como enganche también mejora el circuito futbolístico y el rubio empieza a hacer la diferencia con su habitual clase.

Y llega el desnivel. Crouch Korn la aguanta por derecha, mete un tremendo desborde y tira un venenoso centro atrás que los defensores locales terminan empujando. El 2-1 para Horneros se grita con todo, como debe ser para un gol que puede significar medio Ascenso. Encima, poco después, el ingresado Bubu hace una gran jugada por derecha, su remate da en el palo y el loco Gandhi rompe la red en el rebote. Es el merecido 3-1 y la tranquilidad para jugar los minutos que faltan.

La Tradición hace un tibio intento por descontar, pero ya es tarde. Agesta responde cuando se los necesita y el partido llega al final. Gran victoria de Horneros, que queda a un paso de su único sueño: jugar el año que viene en la "A". Ahora, a pensar en la última fecha ante Mapuche Celeste. De local, con el apoyo de Los Borrachos del Palier. A 90 minutos de marcar un nuevo hito en la historia del fútbol hornereano.


Resumen del partido:

Formación inicial: Rodrigo Agesta; Tomás Melamed, Juan Manuel González, Juan Peluffo, Fernando Lombraña; Federico Pérez Acquisto, Diego Peluffo, Francisco Augeri; Pablo Conti, Leandro Korn, Diego Lombraña. DT: Héctor Miguel - Nicolás Loncharich.

Resultado final: La Tradición "B" 1 - Los Horneros 3

Goles: Primer tiempo: Francisco Augeri (con pelota fofa). Segundo tiempo: defensor de La Tradición (en contra), Leandro Korn.

Cambios: Segundo tiempo: Bubu Melamed por Diego Lombraña, Zequi Rambla por Federico Pérez Acquisto.

La figura: Fernando Lombraña

El Negro demostró que está recuperado de su lesión y ya es el aguerrido defensor de antes. Aunque le tocó lidiar conel peligroso "7" rival, cumplió casi siempre en la marca y transmitió seguridad en una última línea que se mostró sólida en su conjunto. También hubo un gran segundo tiempo de Pablito y un buen aporte de Bubu.

Premio "Carlitos" Rodríguez: Pablo Conti

Pisadita por acá, pie a pie por allá, La Gata Fernández hornereana volvió a justificar la existencia de este premio. En el segundo tiempo, se vio lo mejor del muchacho de la trencita, capaz de dejar desairados a tres rivales en una baldosa.

Premio "Patadita" Borinsky: vacante

Increíblemente, no hubo patadas que merezcan un nombre para este rubro. Claro, el Escandinavo estaba del otro lado de la línea de cal y el Carnicero Santana habría comenzado un curso de yoga que lo convierte en un ser armónico y pleno de autocontrol.

16/11/07

¡Que el domingo cueste lo que cueste...!

Por Nicolás Loncharich

El domingo pasado perdimos una oportunidad interesante para tomar estos dos partidos con mayor tranquilidad. Pero, evidentemente, para ascender vamos a tener que sufrir un poco. Como les dije al final del partido, sentí que perdimos dos puntos y odio perder puntos en estas instancias.

Puede que sea muy exigente, puede ser que les pida demasiado. Pero la culpa es de ustedes. Ustedes fueron los que me ilusionaron con este ascenso. Ustedes son los que no pierden hace 9 fechas. Ustedes son a los que en 10 partidos le hicieron 5 goles. Ustedes son los responsables de que estemos a un paso del Ascenso.

Entonces, ahora es mi turno exigirles que den más de lo que tienen, que no se conformen, en definitiva, que no sean cagones. Yo siento que vamos a ascender, que vamos lograr el objetivo. Después del primer tiempo que jugamos, estoy convencido que así será. Pero para eso falta poner ese "algo más". Lamento insistir con eso, pero es así, y sé que ustedes saben a qué me refiero.

El domingo tenemos que mostrar algo más. Y sé que lo vamos a hacer. Tenemos jugadores para hacerlo y los huevos necesarios. Vamos a tener los huevos necesarios para ir a busacr el partido, para ir a ganarlo desde el primer minuto. Así va a ser cómo lo vamos a plantear. ¿Saben porqué? PORQUE CONFIO A MUERTE EN ESTE EQUIPO.

Les mando un fuerte abrazo. Y nos vemos el domingo para ganar.

15/11/07

Diego Lombraña = José "Pepe" Sand

Delanteros potentes, hombres que parecen un tanto pesados pero tienen cierta habilidad con la pelota, amigos del gol. Diego Melli Lombraña y José Pepe Sand comparten más de una característica futbolística y tienen un "aire" parecido que los hace merecedores de este "Dos gotas de agua".

El Melli y Pepe tienen estilos parecidos. Claro, el delantero de Horneros es algo más "culón" y no me refiero específicamente a la fortuna a la hora de definir. En eso, el goleador de Lanús aventaja por varios cuerpos a nuestro humilde héroe rojinegro. Además, patea penales, algo a lo que Lombraña tal vez se anime algún día..., como viene amagando en los últimos partidos.

Si hay algo netamente a favor del hornereano es su ductilidad con la pelota. Antes lo hacía con más frecuencia, pero aún todos nos deleitamos cada tanto con sus típicas gambetas con la pelota de pie a pie cerca de la línea de cal. Ni qué hablar de aquella juvenil aparición cuando entró ante Cardales y sobre el final empató el partido con una preciosa media vuelta.

Después, la falta de confianza, el matrimonio y varias sobredosis de ñoquis de papa le jugaron una mala pasada y el Melli discontinuó sus cuotas de goles y buen fútbol. Así y todo, sigue siendo un referente del ataque rojinegro y ha aprendido bastante en el arte de dominar su bocota (salvo un pequeño y reciente antecedente ante Mapuche Blanco).

Otra característica común entre ambos jugadores es la difícil relación que tienen con la hinchada. Sand no pudo triunfar en River y parece haber encontrado su lugar en un equipo granate que está cerca del campeonato. ¿Podrá el Melli acallar las críticas por su falta de gol, tal vez convertir un tanto clave y llevar a Horneros al esperado Ascenso? Todo Ingeniero Maschwitz está pendiente de ello...

11/11/07

Una de suspenso

Tarde soleada en el Reducto. Césped corto. Ánimo bien arriba en la previa. A pesar del 0 a 0 contra Cuba, Horneros llegaba en buena forma para el choque clave ante Aranzazu Amarillo. Un partido que más que tres puntos, valía medio ascenso.

Con la ausencia del Doc Loncharich y Bubu Melamed, pero el regreso de Pablo Conti y Leandro Crouch Korn, el Club de los Once era algo más que eso y volvía a tener opciones en el banco de suplentes. Claro, La Gata Fernández hornereana venía de la Creamfields y no se sacó los anteojos negros hasta segundos antes del encuentro, mientras Gandhi preguntaba con total desparpajo cómo estábamos en la tabla de posiciones. Impresentable...

En la charla técnica, el Pelado Miguel recuerda el partido "lái" (light) del domingo pasado y pide otra actitud para lo que está por venir. Loncha expresa su confianza en los players, a los que ve más concentrados que en la triste igualdad ante Cuba.

Y así sale Horneros nomás a jugar. Concentrado, apretando, superado por momentos pero siempre con la intensidad necesaria para un choque de estas características. El trámite es trabado y hay mucha lucha en todos los sectores de la cancha. Las opciones de gol no abundan por ninguno de los dos lados. Nano Tewel y el Melli Diego se van por sendas dolencias y el Negro Lombraña y Crouch Korn saltan al campo de juego.

En el reparto de las situaciones, la cosa queda pareja también. El equipo de Ingeniero Maschwitz casi abre el marcador después de una avivada en un tiro libre que termina con un fuerte remate de Pablito Conti y una mejor reacción del arquero visitante. Del otro lado, el Carnicero Santana salva de forma milagrosa en la línea lo que parecía ser un seguro gol de Aranzazu Amarillo.

Las palabras del Profe Loncha en la semana resuenan en las cabezas de los rojinegros: "Algo más, hay que hacer algo más". Pero ese "algo más" no aparece y en el segundo tiempo, Horneros pierde el control del partido. La defensa aguanta bien los embates del visitante, pero de la mitad para arriba, se crea poco y nada.

Tan sólo cerca del final, una peinada loca de Tomi Melamed obliga a otra buena reacción del arquero amarillo y el Negro Lombaña casi llega para meterla en el rebote. Pero se va el partido y el marcador queda otra vez en cero.

Caras largas de los dos lados. El resultado no le sirve a ninguno, aunque es aún peor para el visitante. Horneros suma un capítulo más en esa suerte de película de suspenso en la que se ha metido. Tan sólo queda hacer todo lo posible para que sea con final feliz...

Resumen del partido:

Formación inicial: Rodrigo Agesta; Tomás Melamed, Juan Manuel González, Juan Peluffo, Mariano Tewel; Adrián Kaminker, Diego Peluffo, Francisco Augeri; Federico Pérez Acquisto; Pablo Conti, Diego Lombraña. DT: Héctor Miguel - Nicolás Loncharich.
Resultado final: Horneros 0 - Aranzazu Amarillo 0.

Cambios: Primer tiempo: Fernando Lombraña por Mariano Tewel, Leandro Korn por Diego Lombraña. Segundo tiempo: Zequi Rambla por Federico Pérez Acquisto, Esteban Bendersky por Adrián Kaminker.

La figura: Juan Manuel González.

Sorpresa: el Carnicero salió de su habitual rubro y se erigió en uno de los puntos altos de un equipo que otra vez estuvo lejos de brillar. Estuvo atento en la marca, anticipó casi siempre y salvó lo que podría haber sido el 0-1 para el visitante. Merecido premio.

Premio "Carlitos" Rodríguez: Vacante

Sí, una vez más. No recuerdo la última vez que vi un caño, un taco o un sombrero de los rojinegros. A esta altura, el que quiera un poco de fantasía, mejor que vaya al cine o se alquile un buen DVD.

Premio "Patadita" Borinsky: Juan Peluffo

El primer marcador central hizo gala de una inusitada violencia y le dio duro abajo al hábil "8" rival. El amarillo tardó mucho en levantarse y lo hizo notoriamente dolorido. Amarilla también fue la tarjeta que se ganó el menor de los Peluffo.

Fotos: Gentileza Gallego Barreiro.

9/11/07

"A"scenso, única palabra en nuestro diccionario

Por Nicolás Loncharich

Es difícil encontrar puntos positivos después del empate del último domingo, pero creo que siempre es bueno encontrarlos. Ojalá podamos darnos cuenta que para ascender hace falta algo más. Entramos en una etapa en donde hay que hacer "algo más". Ese "algo más" representa muchísimas cosas que van desde lo futbolístico hasta lo actitudinal. Y es ahí donde me quiero detener un poco.

Creo que la circunstancias merecen un cambio de actitud a la demostrada el último domingo. Saben lo que pienso de la llegadas sobre la hora del partido, saben lo que pienso de la actitud en la entrada en calor, saben lo que pienso de la postura en la charla técnica. Estoy convencido que para nosotros el partido empieza ahí, 45 minutos antes del pitazo del juez.

Estoy convencido que hay que entrar a la cancha sintiéndose ganador y sintiendo que tenemos equipo para ascender. El domingo no se veía eso dentro de la cancha. Espero que haya sido por la larga inactividad que hizo que nos enfriemos un poco, ojalá haya sido sólo eso.

Por eso es que los desafío a que este domingo cambiemos esa actitud y empecemos el partido 45 minutos antes. Que nos demostremos que estamos para ascender. Que nos demostremos que tenemos huevos para bancarnos estas tres finales.

Ahora es el momento de demostrar que merecemos ascender, porque la verdad es que todavía no ganamos nada. Nos costó llegar hasta acá, pero a mi no me gustaría que quede sólo en una buena campaña. Yo quiero el ascenso y para eso todos necesitamos de todos. No dejemos pasar esta oportunidad de poner todo y de correr el riesgo de quedarnos sin nada. Asumamos el riesgo que esto implica y comprometámonos con esta situación. No seamos cagones. Este equipo lo merece y esa va a ser la única manera de lograr el objetivo.

YO CONFIO A MUERTE EN USTEDES. Sé que me van a demostrar que tienen Huevos para definir esta situación. Yo voy a estar ahí, desde afuera, poniendo todo lo mejor de mi para cumplir este sueño y sé que ustedes también. Por eso, los espero a todos los que sienten a esta camiseta a las 15 hs en la cancha más linda del mundo para demostrarnos y demostrarles a todos que lo del domingo sólo fue un tropiezo y que no existe otra cosa en nuestra cabeza que el Ascenso.

4/11/07

Cero

Regreso a las canchas después de tres semanas de inactividad. Los resultados de la fecha pendiente habían favorecido a Horneros, que llegaba al partido con el siempre complicado Cuba Fátima en el segundo lugar de la tabla y con buenas posibilidades de ascender. Aunque, claro, todo estaba muy apretado y había que sumar de a tres para meterles presión a los perseguidores.

Esta vez, la convocatoria del plantel rojinegro fue buena. A pesar de la inesperada ausencia de Pablito Conti, se produjo la vuelta del Negro Lombraña después de su grave lesión. También dijo presente el gran Bebilacqua y los juveniles Bubu y Zequi, por lo que el equipo de Miguel - Loncharich tenía recambio en el banco de suplentes. Mientras tanto, el eterno Bufo daba cientos de vueltas a la cancha.

En la charla previa, quedó claro que los técnicos no conocen del todo bien a sus players. Ambos entrenadores se hicieron una tremenda galleta con los hermanos Melamed. Primero fue el Pelado Miguel, que le dio cinco minutos de indicaciones a Bubu pensando que era Tomi. Luego, lo siguió el joven Loncha, que cada vez que quería decir "Tomi" decía "Bubu" y viceversa. Papelón de la dupla...

Horneros entró tibio. Aunque era una final, los rojinegros no tuvieron la actitud de otros encuentros y costaba llegar al arco de un rival que encima había empezado con diez. Cuba se limitaba a defenderse, pero el equipo de Ingeniero Maschwitz no encontraba los caminos para crear peligro. La pelota iba y venía de un lado al otro sin pena ni gloria y el local creaba riesgo de contra.

Un par de veces salvó Rodri Agesta lo que pudo ser la caída del arco hornereano. Para el Club de los Once, apenas un tiro libre de Juancho Peluffo que dio en el travesaño y poco más. Mucho centro y pelotas frontales que eran fácilmente dominadas por el arquero local.

En el segundo tiempo, Cuba se metió más atrás todavía y el partido se convirtió casi en un "mitad de cancha". Otra vez el rojinegro tenía el dominio exclusivo del balón, pero era difícil entrar y todo terminaba en pelotazos para los de arriba. Poner un jugador mano a mano era una verdadera utopía y en las pocas situaciones de riesgo faltó justeza para definir. Un par del Melli de cabeza, un gol mal anulado por offside al Doc Loncharich y alguna entrada de Bubu por izquierda no alcanzaron para desnivelar.

Así se fue el partido. Horneros yendo a buscar con algo más de decisión pero carente de ideas; Cuba metido atrás y haciendo tiempo cada vez que podía. El local festejó el empate y los rojinegros se fueron preocupados por haber perdido dos puntos vitales en la lucha por el ascenso. Cero a cero. Cero. Muy poco para rescatar. Pero faltan tres fechas y los partidos con los rivales directos. Lo mejor está por venir.


Resumen del partido:

Formación inicial: Rodrigo Agesta; Tomás Melamed, Juan Manuel González, Juan Peluffo, Mariano Tewel; Adrián Kaminker, Diego Peluffo, Francisco Augeri; Bubu Melamed; Diego Lombraña y Emiliano Loncharich. DT: Héctor Miguel - Nicolás Loncharich.

Resultado final: Cuba Fátima 0 - Horneros 0.

Cambios: Segundo tiempo: Federico Pérez Acquisto por Juan Manuel González, Fernando Lombraña por Mariano Tewel, Zequi Rambla por Tomás Melamed y Esteban Bendersky por Adrián Kaminker.

La figura: Rodrigo Agesta.

Muy pocos puntos altos dentro de Horneros. Dentro de ese panorama, el arquero sub 20 sacó una luz de ventaja porque respondió cuando su equipo más lo necesitó y pudo mantener su valla invicta. Tuvo un par de tapadas importantes en el primer tiempo y siempre dio seguridad debajo de los tres palos.

Premio "Carlitos" Rodríguez: vacante.

Una vez más y van... Tal vez haya que cambiar los rubros y dedicarnos a otros aspectos del juego, como el peor pase, el remate más débil o una especie de ranking rústico...

Premio "Patadita" Borinsky: Juan Manuel González.

Volvió el Carnicero. En el primer tiempo, Santana fue a una pelota dividida como si de ellos dependiera el futuro de su familia y lo cruzó muy duro a un rival. Anaranjada para el matarife, que pelea codo a codo con Kaminker en este rubro.