20/4/09

Una pequeña derrota en Las Praderas

Primer round. Horneros estrenaba su nueva temporada en la “B”, quizás la categoría que más ha transitado a lo largo de los años de Selección en los torneos de la Asociación Intercountry de Fútbol Zona Norte. Y lo hacía con su sello, con total fidelidad a su historia: once jugadores (y ni uno más) listos para entrar a la cancha y dar lo mejor de sí. También se producía el regreso oficial del técnico-filósofo más grande que tuvo el rojinegro: Javier Salorio. Embargado quizás por la emoción, el entrenador perdió el camino hacia Las Praderas y arribó cuando el encuentro ya había comenzado.

La formación inicial hornereana presentaba algunas novedades, pero la más resonante estaba debajo de los tres palos. Adrián Escandinavo Kaminker se había puesto los guantes y no era por el frío. Sí, el mismísimo Gringo Scoponi. El de la patentada volada “bolsa de papas”. Y el “1” se había preparado para la ocasión: estrenaba un buzo verde regalo de su señora esposa, amplia conocedora de las artes futboleras y consciente de que ese color camufla al arquero con el césped y confunde a los delanteros.

A pesar de los contratiempos y una pretemporada poco promisoria, Horneros no arrancó mal su duelo ante Praderas. El equipo salió a presionar bien arriba, sin dejar jugar tranquilo al local y tratando de alejar las acciones del arco del Gringo Kaminker. Encima, un tiro libre de Juancho Peluffo encontró una floja respuesta del arquero, la pelota dio en el travesaño y el Melli Diego iniciaba el año de la mejor manera: empujándola al fondo de la red para poner el 1-0 para los rojinegros.

En la jugada previa al gol, el 20 local le había dejado sus cuatro tapones bien marcados a Loncha en una plancha que mereció la roja directa. Aunque de ojos saltones, el árbitro no afinó bien su mirada y sólo castigó con amarilla. El partido empezaba a ponerse calentito. Pero el principal escollo pasaba por controlar al Del Potro que tenía Praderas. Una verdadera torre que bajaba todos los pelotazos que le tiraban sus compañeros y que no carecía de cierto dominio con el balón.

Salvo una tapada intuitiva del Gringo (sacando por encima del travesaño un fuerte remate), Horneros no pasaba demasiados sobresaltos. Pero llegó un desborde por la derecha y, justo antes del final del primer tiempo la torre de Praderas conectó de cabeza un centro al segundo palo para establecer el 1-1. La casa de naipes que el Club de los Once había construido con tanto trabajo empezaba a desmoronarse…

En el segundo tiempo, Horneros no empezó bien. Los locales comenzaron a monopolizar el balón y las llegadas al arco de Kaminker aumentaron en número y peligrosidad. El “1” tapó muy bien un par de remates, pero nada pudo hacer cuando a la salida de un corner la torre de Praderas encontró una pelota suelta al borde del área chica y la mandó a guardar con un tiro fuerte, bajo y esquinado.

Con pocas armas, el rojinegro fue en busca del empate, pero las jugadas más riesgosas seguían sucediéndose en la valla de Scoponi, que puso aún más verde su vestimenta de tanto revolcarse. Pudo haber llegado la igualdad cuando Loncha quedó cara a cara con el arquero pero se le fue un poco larga. O en alguno de los corners de los minutos finales, cuando ya se había producido la vuelta del Cirujano del Gol, que merodeaba el área. Pero lo único que obtuvo Horneros fue la expulsión del Melli Diego y el 3-1 que llegó en un contraataque letal.

El Club de los Once se fue con una derrota a cuestas. Una pequeña derrota, si se considera la levantada en un rendimiento que venía siendo flojo y la actitud demostrada a lo largo de casi todo el encuentro, aunque aún queden muchísimas cosas para mejorar. El domingo que viene habrá revancha.


Resumen del partido:

Resultado: Las Praderas 3 - Los Horneros 1

Formación inicial: Adrián Kaminker; Esteban Bendersky, Fernando Lombraña, Juan Peluffo, Marcos Peluffo; Tomás Melamed, Diego Peluffo, Nicolás Loncharich, Bubu Melamed; Diego Lombraña y Matías De Tullio. DT: Javier Salorio.

Gol, en el primer tiempo: Diego Lombraña.

Cambios, en el segundo tiempo: Emiliano Loncharich por Tomás Melamed.

La figura:

No hubo una figura sobresaliente, aunque pueden destacarse algunos rendimientos aceptables. Buenos momentos de Nico Loncha y Tomi Melamed en el medio y de la mayor parte de la defensa hornereana. A pesar de los tres goles, el Gringo también cumplió una buena tarea.

1 comentario:

NICO dijo...

COMO EXTRAÑABA LAS CRONICAS!!!!
MUCHACHOS, CREO QUE COMO DIJO JAVI AL FINAL DEL PARTIDO, MEJORAMOS MUCHISISMO, PENSEMOS EN ESO Y EL DOMINGO GANAMOS!
ABRAZO
NICO